Grupo de autoayuda para quienes padecen ciertas molestias ante
comentarios Anti-K, o incluso descubren alguna tolerancia al peronismo.

Los ganadores de los Premios Ernesto a las Mejores Indignaciones de Peluquería 2014


Hoy presentamos los Premios Ernesto a las Mejores Indignaciones de Peluquería 2014, según lo solicitado por nuestro Maestro de Luz Elbosnio, el Sri Sri Ravi Shankar del kirchnerismo de salón.

No fue una tarea fácil ya que el kirchnerismo, además de ser alérgico al fructífero diálogo y al necesario consenso, es refractario a las más elementales reglas de convivencia, por lo que fueron votadas Indignaciones que no habían sido ternadas. Así nos va.

Pero gracias a la invalorable ayuda de los milicianos de la AFSCA, que pusieron a nuestra disposición su Centro de Control Ciudadano, pudimos salvar ese inconveniente procesando a tiempo los centenares de miles de votos y, sobre todo, ponderándolos para que una misma Indignación no gane más de un premio, una anomia inaceptable incluso para nuestro lábil respeto hacia las reglas claras y las políticas de largo plazo.

Premio Ernesto de Oro: La falta de respeto al juez Griesa, héroe de nuestros periodistas serios Willy Kohan y Carlos Pagni y responsable del fallo que debíamos acatar según Macri, Massa, Sanz y otros prohombres de la oposición.

Premio Ernesto de Plata: La falta de corbata y la V peronista de Kicillof en el G20. Un escándalo mayúsculo que nos alejó de ese mundo del que ya estábamos alejados.

Premio Ernesto de Bronce: La sospechosa aparición de Guido Carlotto en un momento complicado para el gobierno. Lanata habría descubierto el yacimiento de nietos que el gobierno usa cada vez que sufre una nueva complicación, lo que ocurre con bastante frecuencia según nos informa el mismo Lanata.

Mención Q: La insistencia del presidente del Senado en presidir las sesiones del Senado. Tal vez el más indignante de los embates kirchneristas, sólo comparable a la utilización de la mayoría oficialista para votar proyectos oficialistas.

Por último, sensible al clamor de las mayorías como toda institución populista, el Consejo Supremo de los Premios Ernesto estableció la Mención Revelación para el indignante caso del niño Casey Wander, el Premio Ernesto a la Trayectoria- propuesto por la Señora Bibiloni- a nuestra querida Mentalista por el conjunto de sus vaticinios y el Premio Ernesto a Ernesto- un premio algo redundante, pero a nuestro entender necesario- por el escandaloso BMW del senador Aníbal Fernández.

Por mezquinas razones de índole procedimental los Premios Ernesto Internacionales a la indignación por la entrega del país a los chinos y al escandaloso viaje a Marruecos de miles de sicarios de La Cámpora disfrazados de hinchas de San Lorenzo que denunció con valentía la compañera Ram, no pudieron instaurarse. Así estamos



Foto: en el Centro de Convenciones Néstor Carlos Kirchner, el General (con sus medallas el Mérito Makista) se dispone a anunciar los ganadores del Premios Ernesto a las Mejores Indignaciones de Peluquería 2014 (gentileza Fundación LED para el Desarrollo de la Fundación LED).






 

Avance de los Premios Ernesto a las Mejores Indignaciones de Peluquería 2014

Presionado por nuestros miles y miles de lectores, nuestro Maestro de Luz Elbosnio, el Sri Sri Ravi Shankar del kirchnerismo de salón, dio curso a Nagus el Magnífico para que defina la terna de los Premios Ernesto a las Mejores Indignaciones de Peluquería 2014.

La tarea no fue fácil, éste ha sido un año generoso en indignaciones indignantes. 


Terna de nominados

La falta de corbata y la V peronista de Kicillof en el G20.

El iPhone que Wado de Pedro estuvo a punto de comprar en NY.

El esguince de CFK.

La sospechosa aparición de Guido Carlotto en un momento complicado para el gobierno.

El sudoku de Boudou.

La falta de respeto hacia el juez Griesa.

La intervención de Máximo en la lista de Sabella.

La insistencia del presidente del Senado en presidir las sesiones del Senado.

La pirotecnia en las fiestas, que aumenta por desesperanza y disminuye por pobreza. 

Las conferencias de Capitanich (reflejo de la Indignación por falta de conferencias). 

El BMW de Aníbal Fernández que indignó a nuestro mentor Ernesto Tenembaum.



Según establece el Manual de Uso de los Premios Ernesto, se podrá votar hasta la mañana del 31 de diciembre del 2014. Los votos corresponden al Ernesto de Oro, de Plata, de Bronce y la ya clásica Mención Q.


Foto: en el Centro de Cómputos Néstor Carlos Kirchner, la Señora Bibiloni (sentada, de espaldas) recibe los votos que luego el General (de pie, con bigote) actualizará según las pautas metodológicas establecidas por el INDEK (cortesía Fundación LED para el Desarrollo de la Fundación LED).









 

Premios Ernesto a las Mejores Indignaciones de Peluquería 2014


























"Es una vergüenza tener estos representantes"
Eduardo Duhalde, en referencia a la V peronista de Kicillof en el G20. 




Consciente del invalorable apoyo que las críticas opositoras aportan al Modelo, en particular en cada nuevo fin de ciclo, y estimulado por el éxito creciente de las anteriores ediciones, nuestro Maestro de Luz Elbosnio, el Sri Sri Ravi Shankar del kirchnerismo de salón, dio curso a la Secretaría de Premios, Fiestas Negras y Bar Mitzvá, (la ya legendaria SePreFiNeBar, por sus siglas en inglés), liderada con mano de hierro por Nagus el Magnífico, para que lance los tan esperados Premios Ernesto a las Mejores Indignaciones de Peluquería 2014.

Como todos sabemos, las Indignaciones de Peluquería se pueden caracterizar tanto por su irrealidad absoluta, como en el caso de la inminente apertura de las cajas de seguridad, como por su absoluta irrelevancia, como la falta de vasitos en Starbucks. Deben, eso sí, haber ocurrido imperativamente durante el año 2014.

Pueden ser Indignaciones Simples (IS), como las calzas presidenciales; Indignaciones Capicúa (IC) como la indignación por el inadmisible manotazo a YPF y la indignación por la escandalosa indemnización a YPF; Indignaciones Genéricas (IG), como "Esto lo tendría que haber hecho mucho antes" o incluso Indignaciones Mamushka (IM), como el indignante despido de Adrián Caetano, la prohibición de la película que hizo Caetano sobre Néstor, el estreno de la otra película sobre Néstor, la exhibición de la de Caetano en Vimeo, después en la tele, después en cine.

Pese a ser kirchneristas, creemos en el respeto a las reglas y en las políticas de largo plazo, por eso mantendremos el mismo sistema de premios de las ediciones anteriores: Ernesto de Oro, Ernesto de Plata, Ernesto de Bronce y Mención Q, patrocinada por el amigo Santix en honor al incansable denunciador de nimiedades stalinistas, así como todos los premios que se nos ocurran sobre la marcha.

Como también apoyamos la Transparency y el Open Coso, proponemos un sistema abierto y participativo en el que nuestros miles de lectores puedan armar la terna de nominados, agregando sus propios aportes y verificando la transparencia del escrutinio, como nos pide la gente.

Primeros ejemplos:

  • Las fotos de Randazzo con los nuevos trenes.
  • La falta de corbata y la V peronista de Kicillof en el G20.
  • Indignación porque había que responder 40 preguntas y si respondías mal no te dejaban viajar.
  • Tener que poner en blanco a la chica y eso sale un disparate de caro.
  • El DNI con CUIL, una intromisión insoportable a nuestra vida privada ("¿Quien se cree Randazzo, Mark Zuckerberg?").
  • El iPhone que Wado de Pedro compró en New York.
  • El subsidio a los travestis.
  • CFK copa el horario de los noticieros con las cadenas nacionales.
  • Sospechosa aparición de Guido Carlotto en un momento complicado para el gobierno.
  • La inútil confrontación con los Fondos Buitre y el inminente pago a los Fondos Buitre.
  • La falta de respeto hacia el juez Griesa.
  • El despegue del ARSAT 1 con la conducción de Víctor Hugo por la TV Pública.
  • Máximo hablando en el acto de La Cámpora (recordemos que una de las Indignaciones de Peluquería de años anteriores fue que "a Máximo no se le conoce la voz").
  • Las vacaciones de los presos.
  • Indignación porque los trenes nuevos no se compraron con sobreprecios y "lo barato sale caro".
  • La exigencia de una Justicia realmente independiente y la exigencia de no modificar nada en la Justicia.
  • CFK hablando con Sabella y los jugadores después del Mundial.
  • De Vido refiriéndose al ARSAT 1 como "cuete".
  • Capitanich y el calificativo de "marmota" al periodista de TN Fernando Carnota.
  • Casey Wander.
  • Denuncia contra CFK ante el INADI por haber tratado de senil al juez Griesa.
  • Indignación contra el plan Argentina Sonríe porque hay gente que pasa hambre.
  • Las misteriosas internaciones de Florencia Kirchner.
  • La aversión de Florencia Kirchner a internarse en hospitales públicos.
  • La flexibilización del cepo, porque evidencia que había una negación oficial del cepo. #IndignaciónGataflora
  • Las horas desperadas que vivió Longobardi por el violento robo comando de su reloj y la sobreactuación de Sylvestre por un pequeña fogata en su vehículo. #IndignaciónDobleVara
  • La falta de aire acondicionado en los actos desde que no está Parrilli.
  • Los afiches nazis y el camioncito militante.
  • El dibujo del nuevo IPCNU a pesar de estar homologado por el FMI, porque la vuelta al FMI demuestra que el gobierno giró a la derecha. #IndignaciónCalesita 
  • Las reiteradas renuncias de Capitanich.
  • Las conferencias de Capitanich.
  • Las respuestas que da Capitanich.
  • Las cifras que da Capitanich.
  • Lo temprano que son las conferencias de Capitanich.
  • La existencia material de Capitanich.
  • La intervención de Máximo Kirchner en la lista de Sabella.
  • La transmisión por canal 
  • oficial de la lista de Sabella.
  • Las notas de Verbistky borradas por Verbitsky.
  • Que Matías Martin no admita su kirchnerismo.
  • El sudoku de Boudou.
  • La asistencia de Boudou a recitales.
  • Las fotos de la novia de Boudou.
  • Las declaraciones de la novia de Boudou.
  • La existencia material de Amado Boudou.
  • La foto falsa de la remera de Maradona bancando a Boudou.
  • La vida personal de Maradona.
  • El sueldo de Maradona y Victor Hugo que pagaron los venezolanos.
  • Los comentarios de Víctor Hugo sobre las villas.
  • Los comentarios de Víctor Hugo sobre las conductoras de TN.
  • Los comentarios de Víctor Hugo sobre Scioli en TN.
  • La existencia material de Víctor Hugo.
  • La insistencia del presidente de Senado en presidir las sesiones del Senado.
  • El Código Penal que nunca se presentó.
  • Que Dady Brieva no le crea a Lanata.
  • Los artistas K que van a lo de Mirtha a negar que la gente le teme a esta dictadura.
  • El miedo de Campanella y Casero a ser atacados por twitteros kirchneristas.
  • Los ataques que sufre Wiñazky por señalar en Twitter a todo aquel que los domingos a la noche no esté creyendo lo que dice Lanata.
  • La falta de pirotecnia que refleja la crisis tan negada por el gobierno.
  • CFK tratando de "chiquito" al ministro de Economía. 
  • El indignante silencio de CFK durante meses y la vuelta de las insoportables cadenas nacionales.
  • Los incidentes entre aviones en Aeroparque.
  • El preocupante silencio oficial en torno al aumento de consumo de fideos codito.
  • Los billetes de Evita que no entran en los cajeros.
  • Randazzo que aumenta la frecuencia de los trenes para joderte en los pasos a nivel.
  • Los trenes costaron 51 vidas.
  • Los trenes nuevos son cómodos y eficientes pero $2 es muy barato. Subsidian a las empresas.
  • Que hayan bajado la nafta por primera vez, lo hubieran hecho antes.
  • Las quejas porque no se puede viajar al exterior, en las colas de Ezeiza, detrás de 300 pasajeros.
  • Es un escándalo que no se pueda conseguir mesa, los negros ahora salen y copan los locales.
  • La baja en la venta de los shoppings, junto a la venta récord de fin de año.


Staff de Cazadores de Indignaciones:

Carita, Juan Microagencia, Manolito, Leonardo, Marto Javier, Roberto, Marina Soto, Flopa, Santiago Mayuli, Grego, Cristian, Kenia,  Alejandra, Diego, Adan de Ucea, el incansable Ernest Scribbler, Iris.

Foto: durante la edición 2013, nuestro querido mentor Ernesto Tenembaum recibe con ojos húmedos el Ernesto de Plata por su notable Indignación de Último Momento (IUM), referida al escandaloso grupo electrógeno de La Cámpora. Es cierto que estos jóvenes exageran, con un equipo manual alcanzaba.

 

Así fue la gran Cena de la MAK del miércoles 3 de diciembre (Barban)

















Preocupado por el giro a la derecha que no logra seducir a la derecha y el ministro marxista que no logra convencer a los marxistas, nuestro Maestro de Luz Elbosnio, el Sri Sri Ravi Shankar del kirchnerismo de salón, dio curso a la Secretaría de Guateques, After Offices y Velorios (la ya legendaria SeGuAftOffVel, por sus siglas en inglés) liderada por Nagus el Magnífico para que organice una Gran Cena de la MAK el miércoles 3 de diciembre, en honor a San Sofonías, profeta que anunció catástrofes unos dos mil quinientos años antes de la Mentalista.

La amiga Graciana, pese a haber recibido la correspondiente NO invitación, volvió a no iluminarnos con su presencia. Así nos va.

Luego de leer escrupulosamente el Orden del Día que estableció la imperiosa necesidad de contar con uno, y de definir de manera fehaciente el número de fin de ciclo kirchnerista de la semana (“Doy fe que es el Nº 10.443” anunció la doctora María Amelia, escribana de la MAK) dimos curso al Inye para que lanzara su ya legendaria y muy esperada Crónica de la Rosca Bonaerense.

El Inye empezó recomendando un muy buen post del amigo Escriba sobre un cierto cambio de ánimo general (yo diría que el cambio apareció al menos desde la publicación de la encuesta de Poliarquía, esa que enfureció a nuestros amigos antiK).

"Ya se estaban repartiendo ministerios, pero la oposición hace todo para que ganemos de nuevo. Esperemos que nosotros también hagamos lo posible", arrancó. También mencionó la columna de Morales Solá del 16 de noviembre, en la que menciona "el temor que provoca la posibilidad de un cristinismo desafiante en el próximo período presidencial", casi el mal absoluto.

Nuestro Maestro Elbosnio recordó la apuesta de Barban con Lucas Llach del 2011, en la que Barban acertó apostando a una victoria en primera vuelta. "Hoy nos va a costar ganar de nuevo en primera vuelta", aclaró el George Clooney de la MAK.

El Inye comentó que le preocupaba como llegamos a las PASO, es decir qué se hace con las internas del FPV. "Hasta ahora Scioli puenteaba solo. Los gobernadores que apoyan a Scioli son los que se van, los que se quedan están expectantes" (ya nos había comentado el Chivo Rossi cuando vino a la MAK que los grandes jugadores esperarían hasta el final antes de elegir).

El Inye descarta el Gran Arreglo del que se habló mucho en este último mes (Scioli a presidente y Randazzo a Provincia): todos van a las PASO. "Hoy las encuestas sólo sirven para ver el crecimiento o estancamiento de cada candidato". Según un consultor, Randazzo estaría pisándole los talones a Scioli (sobre ese tema recomiendo un post reciente del Inye).

"¡Es un consultor serio! ¡Y ojo que Randazzo no empezó la campaña!", gritó Osky desde el fondo de la sala, lanzando una botella de El Justicialista sobre un globo del PRO que quedó de una reunión anterior.

El amigo Leo, nuestro Gerente de Mesas Móviles, llegó bien comenzada la cena y opinó que las mesas que había dispuesto Moni, del Círculo Salvavidas, estaban bien. Como sabemos, el mundo se divide en gente que hace y gente que opina.

Para Barban y el Inye, si sólo va Scioli a las PASO hay una parte significativa del kirchnerismo que no participaría.

"Lo que hizo Menem en el ´88, caminar el territorio y acordar con las 62, es parecido a lo que hace Florencio", agregó nuestro Hombre en La Plata. "Floro peina el territorio, CFK le pidió que no se baje".

Para Nagus, CFK no puede elegir un candidato antes de las PASO y correr el riesgo de que pierda. Para el Inye, "sólo si fuera palpable un triunfo de Scioli en las PASO, CFK se jugaría".

El amigo Tom Slick, el Acotador Compulsivo de la MAK que hasta ese momento casi no había participado- amedrentado tal vez por la ausencia de Dani, Interrumpidor Oficial de la MAK y Matías, su joven Padawan- preguntó si Florencio tiene liderazgo, algo que para el Inye resulta evidente.

"Yo preferiría que tenga votos, liderazgo ya tenemos", acotó nuestro Maestro de Luz en clara referencia a la Chica Que Nos Gusta.

Ante el comentario de un compañero sobre la posibilidad de que Macri y Massa vayan juntos, el amigo Contradicto explicó que eso es imposible: "la disyuntiva en el establishment sigue siendo la misma que en el ´95, devaluar o anclar al dólar, y Macri y Massa apuestan cada uno a una opción diferente".

"Puede ser, pero también hay mucho que los une", acotó nuestro Maestro de Luz mientras arreglaba su tiara makista. "Podrían tomar deuda y vender YPF. La deuda es el gran narcótico".

"De acuerdo", aceptó el Contradicto para evitar un certero golpe de tirador, mientras el Canilla intentaba calmarlo, "pero no olvidemos que Massa es Techint".

El Inye contó que según el Vasco Amondarain el massismo le ofreció a Macri ir a las PASO con Massa pero no aceptó. Massa por su lado le puso una cuña entre Sanz y Morales (que le está juntando concejales a Massa).

La Rama Femenina brilló con Graciela B. (con quien conversamos sobre el desenfrenado tiacholismo de Gargarella), Lauravi, Mabel y Helenita, pese a las dolorosas ausencias de Gladiadora y la Señora Bibiloni.

Luego, el gran Barban nos dio una clase magistral sobre política económica, control de cambio y negociación con los Fondos Buitre.

Para Barban el control del dólar se debió a una batería de medidas, un combo complejo de iniciativas ortodoxas y heterodoxas.

En enero se liberó el cepo para todos lo que pudieran comprar en blanco (hasta hoy unos 2.500 MUS$ que en su gran mayoría "pasaron al negro"), lo que aniquiló el precio del Blue.

Liberar el dólar fue a regañadientes ya que son recursos que "salen de la economía" (mayoritariamente a la venta en negro pero también van al colchón).

Como soy un alumno aplicado, tomé nota de los puntos principales indicados por el maestro Barban:

1) La devaluación frenó la caída del gasto en turismo de argentinos en el exterior (2.800 MUS$), ayudando al equilibrio de la balanza de divisas.

2) El gobierno encontró financiamiento alternativo, a través del SWAP chino (11.000 MUS$) y el arreglo con las cerealeras (entraron 5.700 MUS$, un monto mayor a lo esperado).

3) El gobierno subió la tasa de interés por encima de la inflación. Es un cambio mayor, durante 11 años la tasa fue negativa, no incentivaba el ahorro (al contrario de lo que ocurre en Brasil).

"Hay una percepción creciente que el peso es una buena opción", explicó Barban. "Y que los van a empomar si hacen una cagada", acotó nuestro Maestro de Luz, en lenguaje un poco técnico.

Con respecto a los Fondos Buitre, Barban sostuvo que "el gobierno no niega la realidad del fallo, sólo hace dos planteos: pagarle a los otros bonistas mientras discute con los Buitre (algo que Griesa rechazó) y que la solución sea definitiva y sustentable para la Argentina".

"Lo que cambió es que hace cinco meses todos alababan a Griesa, y hoy eso sería la muerte política. Recordemos los pedidos de Macri o Massa de acatar el fallo o las alabanzas de Pagni o Willy Kohan hacia el juez ("Con gran destreza y eficiencia Griesa demuestra que en su país se cumple el derecho de propiedad" escribía el economista preferido de Longobardi). En ese sentido el gobierno ganó la batalla política. Hoy 140 países apoyan la idea de la ley de quiebras para los países".

"Por otro lado", siguió Barban, "el precio de los bonos supuestamente en default no bajó. El mercado no penalizó a la Argentina".

Hablamos de Brasil, el ejemplo a seguir según los economistas serios hasta no hace mucho. "Brasil se apoya sobre un relato brillante y Plata Dulce, la tasa es el doble de la inflación. El problema es que nosotros necesitamos de la región y en particular de Brasil, que no crece". 

"China nos compra soja pero Brasil nos compra empleo", acotó el Maestro de Luz, para demostrar que la presencia de Barban no lo amedrentaba.

"El requisito fundamental para un gobierno populista además de ganar elecciones es mostrar que tiene el control. A principio de 2014 hubo sensación de descontrol", continuó Barban para demostrar que las acotaciones del Maestro de Luz tampoco lo amedrentaban a él.

El amigo Mendieta, que junto a Pura Magia volvió para combatir la pachorra autocomplaciente con la sólida terapia del sillazo, preguntó si el consumo puede ser el motor permanente. "Se estandarizaron consumos que no sé si son sostenibles en el tiempo, como familias con 3 autos, cambio de plasma todos los años..."

Para nuestro Maestro Elbosnio lo que no es sustentable es que no haya restricción externa, es decir "que gastemos dólares que tanta falta hacen en celulares importados o ensamblados en Tierra del Fuego".

Para Mendieta nuestras campañas son de pocas promesas, algo que deberíamos cambiar. Para Elbosnio, en cambio, es bueno no prometer y sacar a relucir la gestión, como aconseja el Chivo Rossi. "Prometer, promete cualquiera".

"Claro, pero hoy es diferente", acotó Mendieta, mientras Pura Magia intentaba sacarle de la mano una botella de cerveza rota. "Si llegamos bien a las elecciones no es muy diferente, pese a que CFK no sea candidata", insistió el Maestro de Luz.

"Cuando mejor esté la situación económica más fino tenemos que hilar, el binomio cambio-continuidad es más sutil, más centrista", argumentó Mendieta mientras apoyaba la botella en la mesa y tranquilizaba a Pura Magia.

Barban recordó que el alfonsinismo proponía sacrificar el presente para lograr un futuro venturoso. "Néstor aniquila eso, porque el populismo es puro presente", concluyó bajo el aplauso enfervorizado de, justamente, los presentes.

"El populismo es pan para hoy y hambre para mañana, en eso los políticos serios son más expeditos" agregué aunque, como suele suceder, nadie me escuchó.

Luego de rezarle a la Vírgen de los Makistas recibimos de vuelta a Maby y al amigo Russian casi sano y salvo, cosa que no dejamos de agradecer.



Foto: en las escalinatas del Círculo Salvavidas, nuestro Maestro de Luz Elbosnio (en el centro, con uniforme makista) acompaña a Barban, al Inye, Contradicto, el General, Mendieta y Pura Magia.
Detrás, de izquierda a derecha y de arriba hacia abajo los miles de participantes de la cena que no pudimos listar por falta de recursos.

Esa misma merma de recursos es la que me obligó, otra vez, a oficiar de fotógrafo con la vieja Fed-2 que me regaló el Pato Echegaray en la Ferifiesta del ´83.


 

El nuevo matón del barrio


Columna publicada en Nueva Ciudad.

“Mientras se garantiza el derecho de los presos a tener un sueldo, se le quita un ingreso a la gente con Ganancias”.

Sergio Massa, diputado y candidato a presidente / diciembre 2014.


“Hay que meter bala a los delincuentes”.

Carlos Ruckauf, vicepresidente y candidato a gobernador de la provincia de Buenos Aires / agosto de 1999.



Unos años después de que el socialista François Mitterrand aboliera la noble tradición de la guillotina, una encuesta alertó sobre el aparente cambio de ánimo en la opinión pública francesa. Según ese estudio casi un 60% de la ciudadanía apoyaba el restablecimiento de la pena de muerte.

La encuesta consistía en unas pocas preguntas referidas a un supuesto atraco: ¿si unos desconocidos armados entraran en nuestra casa y amenazara a nuestra familia, buscaríamos protegerla aún al extremo de matarlos?

Confieso que si me topara en plena noche con varios desconocidos armados en un pasillo de mi casa mi primera reacción sería la de cortarlos en juliana, o incluso en brunoise, antes de hacerle correr el menor riesgo a mi familia.

En realidad lo notable no era la comprensible reacción de la mayoría de los encuestados frente a un peligro inminente sino la extrapolación de esa reacción en clave política: “la gente pide la pena de muerte”.

Ocurre que el pensamiento reaccionario suele apoyarse en este tipo de analogías elementales pero atractivas.

En 1999, Carlos Ruckauf, vicepresidente y candidato a gobernador de Buenos Aires, criticó la gestión deLeón Arslanian, ministro de Justicia del gobernador Eduardo Duhalde, logrando su renuncia y el freno de la reforma con la que había intentado desarmar la mejor Maldita Policía del mundo. Para ilustrar el cambio propuesto llamó a “meter bala” a los delincuentes, transformando a los policías en jueces y restableciendo la pena de muerte de hecho. Según aclaró, era “lo que pedía la gente”.

El candidato logró ganar las elecciones pero no terminar su mandato. Poco después del helicóptero que se llevó a Fernando De la Rúa, el matón que prometía bala también escapó, dejándole la provincia en llamas a su vice Felipe Solá (quién relanzaría la reforma policial junto a Arslanian), para refugiarse en los confortables salones de la Cancillería como ministro de Duhalde.

Pocos años después, bajo la presidencia de Néstor Kirchner, fue el turno del ingeniero Juan Carlos Blumberg, quien logró convocar multitudes y con apoyo mediático presionó al Congreso con propuestas que también parecían de sentido común: mayores penas para lograr menor delito. “Tuvo éxito oportunamente y para nosotros quedó la ruina de un Código Penal confuso, con amenazas penales sin proporción alguna en la reacción punitiva”, escribió el gran penalista Julio Maier.

Su falso título de ingeniero terminó con una prometedora carrera, como el abandono de la provincia terminó con el futuro político de Ruckauf.

Hoy tenemos un nuevo matón del barrio.

Luego de denunciar el proyecto del nuevo Código Penal, presentado por anarquistas irredentos como Federico Pinedo y Ricardo Gil Lavedra (que entre otras calamidades incentivaría las excarcelaciones, algo que en realidad regula el Código Procesal) Sergio Massa dobló la apuesta proponiendo la prisión preventiva de oficio. Llenar las cárceles ya colapsadas de presos sin condena con más presos sin condena -es decir inocentes- nos daría al parecer mayor seguridad.

También denunció que los presos que trabajan reciben un sueldo, añorando tal vez los buenos tiempos en los que picaban piedra por un plato de tasajo, y reclamó por unos asombrosos “derechos humanos para las víctimas de inseguridad”.

La distinción entre gente por un lado y presos por el otro apunta a consolidar la fantasía reaccionaria de la ciudadela sitiada. No hay complicidad policial o penitenciaria a desarticular, sólo hordas salvajes que debemos frenar imponiendo mayores penas -pese a que eso nunca redujo el delito- y eliminando derechos básicos, porque todos sabemos que un bárbaro no los merece.

Antes de exigir menos derechos y mayores penas sería recomendable que el nuevo matón del barrio le pregunte a su socio Solá por la reforma de la policía bonaerense que llevó a cabo junto a Arslanian, también coautor de ese proyecto de nuevo Código Penal que nunca leyó.

Aunque es cierto que se trata de una tarea un poco más compleja que enunciar aforismos de sobrecitos de azúcar y que requiere algo más de valor político que prometer bala o denunciar el sueldo de un preso que trabaja.


Foto: proyecto de afiche de campaña de Sergio Massa a favor del diálogo, el consenso y todo eso (cortesía Fundación LED para el Desarrollo de la Fundación LED).
 

Próxima Gran Cena de la MAK el miércoles 3 de diciembre





Preocupado por el fin de ciclo kirchnerista que, como tantos otros anuncios, tarda en llegar, nuestro Maestro de Luz Elbosnio, el Sri Sri Ravi Shankar del kirchnerismo de salón, dio curso a la Secretaría de Guateques, Bar Mitzvah y Fiestas Negras (la ya legendaria SeGuBarFi, por sus siglas en inglés) liderada por Nagus el Magnífico para que organice la próxima Gran Cena de la MAK el miércoles 3 de diciembre, en honor a San Sofonías, profeta que anunció catástrofes unos dos mil quinientos años antes de la Mentalista.

El lugar es el habitual, el ya legendario Salón Dorado Horacito Rodríguez Larreta del Círculo Salvavidas, ubicado en Cabello 3958, barrio carenciado de Palermo, a las 20:00.

Como creemos en las tradiciones mantendremos el sistema lanzado en la última cena: se pagará una entrada única de $60, lo que dará opción a empanadas frozen, vino de ferretería, gaseosa tibia a granel y las palabras de nuestro Maestro de Luz (por las que no se cobrará adicional alguno).

Quienes a pesar de la crisis, de la GestAFIP y del embate contra nuestros ahorros suizos dispongan de recursos podrán negociar con Moni (del Círculo Salvavidas) el plato Super De Luxe Primera Especial, como milanesa, pechuga, ensalada y demás manjares.

Por razones de seguridad nos vemos en la obligación de mantener el santo y seña: "¡Qué desmejorado que está Elbosnio!". Se lo exigirá en la entrada bajo pena de llamar al pelado de la Metropolitana.

Foto: Durante el último Congreso de Actualización Doctrinaria de la MAK, el General (en uniforme de fajina) enseña a elaborar dispositivos para amedrentar opositores con un frasco de mayonesa y un clip.

Cortesía Fundación Led para el Desarrollo de la Fundación Led.
 

La extraña virtud de la alternancia



Columna publicada en Nueva Ciudad.


Una letanía persistente señala a la alternancia en la política como La Virtud, así, con mayúsculas. Se hace referencia a ella no como la posibilidad que nos ofrecen las elecciones de decidir cambios por la mayoría sino como una característica positiva en sí. Es más, para algunos se trataría incluso de la esencia de la democracia.

El discurso opositor parece enamorado de esta magnificación. La alternancia per se aportaría lo necesario para evitar la corrupción, el enriquecimiento ilícito, las prebendas. En fin: que la cosa pública no se transforme en cosa privada. De lo que se trataría, en síntesis, sería de evitar como el ébola el riesgo del gobernante que se enquista en el poder (para utilizar una muy exitosa metáfora de anatomía patológica).

De tan virtuosa, la glorificación de la alternancia logra lo que pocos: que se tilde a un largo gobierno democrático de monarquía o dictadura, obviando el detalle del voto periódico de una mayoría que lo revalida.

Lo extraño de la cuestión es que la alternancia como cura preventiva contra el poder enquistado sólo es valorada en el caso del Poder Ejecutivo, preferentemente nacional. El resto de los factores de poder no sólo no ve la alternancia como un valor en sí sino que valora todo lo contrario, la continuidad.

Ninguna junta de accionistas votaría en contra de la continuidad de un CEO exitoso para beneficiarse de algo tan intangible como la alternancia. Al contrario, los buenos resultados suelen ser una buena razón para esperar más buenos resultados.

Un CEO recibe el mandato de sus accionistas al igual que un presidente de sus electores. Las decisiones de un CEO enriquecen o empobrecen a sus accionistas de forma comparable a las decisiones de un presidente con sus representados. Ambos disponen de un gran poder discrecional delegado y pueden padecer la tentación de usar los recursos de los accionistas-electores en beneficio propio, pero sólo uno tiene un freno legal a su continuidad.

La Iglesia Católica elige a su representante máximo- con rango de Jefe de Estado- a perpetuidad, delegando en Dios el término de su mandato.

Algo similar ocurría con los jueces de la Corte Suprema. Aunque siendo el nuestro un Estado laico ya no era Dios quien estipulaba el fin de su mandato sino la biología. Hoy existe el límite de una edad máxima, pero la idea sigue siendo la misma: privilegiar la continuidad y la experiencia por sobre la alternancia.

Tampoco los senadores o diputados tienen un límite de mandatos, como tampoco lo tienen esos expertos en estructuras enquistadas como son los rectores de universidades.

No permitir la continuidad de un Jefe de Estado limita su discrecionalidad y sus eventuales abusos pero también nos hace perder los beneficios de una experiencia exitosa. Si la presidencia fue fallida, ¿no podemos suponer que pocos la querrían prolongar?.

En la mesa del Poder, donde el presidente discute con empresarios, dueños de medios, representantes de la Iglesia, sindicalistas, embajadores o jueces, el único cuya continuidad está limitada es justamente el único que votamos. La razón es que tememos al tirano perpetuado por los votos, aunque nuestra historia sea avara en tiranos democráticos y prolífica en dictadores que nadie votó.

Hasta la reforma de 1994, nuestra Constitución preveía un mandato no renovable. Nuestros constituyentes parecían temerle más a los riesgos que podrían generar dos períodos consecutivos de un mismo presidente que a la pérdida de los beneficios de prolongar una presidencia exitosa.

Mientras limitamos su continuidad y los juzgamos cada dos años en base a los resultados coyunturales, solemos exigir que nuestros gobernantes tengan una visión de largo plazo. Es decir, que construyan futuro limitando su presente y que no hagan hincapié en esa coyuntura que decidirá nuestro voto y su continuidad (en ese sentido es asombroso que a nadie se le haya ocurrido la idea de limitar los mandatos presidenciales a un solo día).

La magnificación de la alternancia como esencia de la democracia no deberían limitar los entusiasmos, los deseos y la libertad de elección del verdadero protagonista de esa misma democracia, el ciudadano.


Foto: reacción de una junta de accionistas a la propuesta de no reelegir al CEO exitoso para beneficiar de la virtud de la alternancia (gentileza Fundación LED para el Desarrollo de la Fundación LED). 
 

La sensación de corrupción



Columna publicada en Nueva Ciudad.


“Me preocupa la corrupción del puente que no se hace, no la corrupción del puente que se hace y cuesta 40% más.”

“El costo visible de la corrupción es cuando convive con las decisiones equivocadas respecto de la gestión del país y el rumbo.”


Miguel Bein (entrevista de J. Fontevecchia / marzo del 2014)


Una letanía persistente describe a los kirchneristas como gobernantes inescrupulosos cuyo único fin es acumular riquezas pero que, sin embargo, confrontan con los grupos económicos más poderosos, históricamente proclives a premiar los apoyos políticos.

Dispondrían para el saqueo de la ayuda incondicional de una justicia adicta aunque, asombrosamente, no logran el apoyo de esa misma justicia adicta en iniciativas que consideran vitales, como la Ley de Medios.

El hecho de que las condenas por corrupción no estén a la altura de la sensación de corrupción, sólo prueba la complicidad judicial. “Si no condenan a los chorros es que los jueces también lo son”, concluye el ciudadano indignado, reemplazando al fallo imperfecto por la perfección de sus certezas.

Ese mismo ciudadano indignado exige que un funcionario sospechado o investigado renuncie, otorgándole a los medios de comunicación o al Poder Judicial, cuyas investigaciones pueden durar más de una década, la facultad de vetar ministros o incluso Jefes de Gobierno.

Los candidatos opositores, subidos a esa ola indignada, proponen implementar una genuina independencia judicial a la vez que prometen “mandar a todos los delincuentes a la cárcel”, un deseo algo contradictorio con la tan deseada independencia de los jueces.

La sensación de corrupción clausura cualquier debate político. El sospechado es corrupto y el corrupto es sólo eso, un corrupto. La sensación de corrupción, además, iguala al conjunto de la oposición. Quienes están a favor de alguna iniciativa oficial la denuncian por estar de alguna manera ligada a la corrupción junto a quienes se oponen con ahínco a esa misma iniciativa.

El enfrentamiento político no sería entre políticas diferentes o diagnósticos opuestos sino entre honestos y corruptos. Un combate, al parecer, milenario.

Sin embargo, si gracias a las investigaciones de un ignoto Lanata del siglo XIX hoy nos enteráramos que el ministro Eduardo Wilde robó un cenicero, no lo trataríamos por eso de corrupto. “Es sólo un cenicero” argumentaríamos con razón. ¿Y si fueran cien? ¿Y si fueran mil o diez mil ceniceros?

¿A partir de cuántos ceniceros Eduardo Wilde dejaría de ser el ministro brillante al que le debemos la Ley 1420 de Educación Común para transformarse en un corrupto cuya obra política no merece siquiera ser analizada sino sólo denunciada su condición de tal?

Si nos enteráramos que Moreno Ocampo pasó viáticos indebidos durante el Juicio a las Juntas o nombró amigos en la fiscalía, ¿eso modificaría su notable tarea como fiscal adjunto en ese mismo juicio?

Por otro lado y más cerca de nosotros ¿el drama de los ´90 fue la pista de Anillaco, la Ferrari de Menem y el petit hotel de María Julia o un diagnóstico errado que llevó al país a la quiebra?

Del primer peronismo hoy valoramos el aguinaldo, las vacaciones pagas, las viviendas sociales, los hospitales o el estatuto del peón, pero insólitamente no recordamos las escandalosas joyas de Evita, la denunciada fortuna de Perón o los sospechosos manejos de la Fundación Eva Perón. Sin embargo, esos hechos desbordaron los medios opositores de aquella época y las conversaciones indignadas de ciudadanos virtuosos. Incluso algunos, pese a apoyar muchas de las medidas oficiales, respaldaron el golpe del ´55 con el argumento de “frenar los abusos”.

La historia demostró que sólo lograron interrumpir los logros.

Un gobernante debería ser juzgado por sus iniciativas políticas, como un director lo es por sus películas sin que nos preguntemos si su productora está al día con las cargas sociales. Iniciativas y películas son lo que perdura y lo que cambia, para bien o para mal, la vida de las mayorías.

Si además el gobernante o el director robaron un cenicero, o mil, o diez mil, esperamos que sean juzgados y condenados, probablemente con la dificultad que implica juzgar y condenar a cualquier ciudadano poderoso (si los jueces fueran inmunes al poder nuestras cárceles no estarían tan llenas de pobres diablos y tan raleadas de poderosos).

Se suele argumentar que los políticos manejan “nuestra plata”, algo que no ocurre con los privados. Es un argumento falaz: el dinero que fugan los privados, las sobreganancias por posiciones dominantes o los ingresos no declarados son igualmente “nuestra plata”.

Como señala Miguel Bein, el costo mayor de la corrupción es el de instrumentar decisiones políticas desacertadas. Por eso quienes se interesan por la política deberían focalizar su atención en esas decisiones y no en el eventual instrumento delictivo, una tarea que deberían dejarle al fiscal.


Foto: Eduardo Wilde en su escritorio junto al sospechoso cenicero cuya adquisición con fondos federales nunca fue desmentida (gentileza Fundación LED para el Desarrollo de la Fundación LED).

 

La esencia de la democracia


Columna publicada en Nueva Ciudad.


Hace unos días, Ernesto Sanz, candidato radical del multimarca UNEN, explicó que “la regla central de la democracia es que nadie tiene la verdad total”.

Cleto Cobos, ese extraño político que ejerció la oposición desde la vicepresidencia de la Nación, consideró que “la democracia es diálogo”.

Gerardo Morales, otro humorista radical, explicó por su lado que tener mayoría en el Congreso frena toda posibilidad de diálogo, lo que nos llevaría a pensar que la verdadera democracia es la que se ejerce desde la minoría.

Desde el PRO, la diputada Laurita Alonso opinó que “el disenso es la esencia de la democracia”, es decir que el gobernante que consiguiera el mayor apoyo popular- disminuyendo el disenso- estaría atentando contra la esencia misma del sistema que lo llevó al poder.

Para Sergio Massa, la esencia de la democracia es, en realidad, la alternancia. Un gobierno exitoso que lograra ser reelegido durante varios períodos sería, bajo esa interpretación, menos democrático que un gobierno fallido que, al no conseguir renovar su mandato, estaría incentivando la virtuosa alternancia. Los gobiernos fallidos y no los exitosos serían, entonces, los pilares de la democracia.

En la seguidilla de citas de sobrecitos de azúcar en la que se ha convertido el discurso opositor (la Oposición Narosky por llamarla de alguna manera) no es infrecuente escuchar que la esencia de la democracia es, además, muchas otras cosas, como el respeto hacia las ideas de los otros, la tolerancia, la austeridad, la estima por el adversario, la transparencia, la duda, la ausencia de ambición personal o incluso la falta de soberbia.

Lo asombroso es que en esa larga cadena de definiciones nuestra Oposición Narosky suele obviar la más elemental: el voto popular.

Pino Solanas, senador porteño preocupado por los estragos de la megaminería, llegó a explicar, luego de una derrota de sus aliados en Salta, que los votos de aquella provincia eran de baja calidad. No habría nada, al parecer, como la legitimidad que otorga ser minoría.

La letanía opositora describe al gobernante democrático como un hombre justo, que no cree tener la verdad, respeta a sus adversarios, cree en la necesaria tolerancia y en el fructífero consenso y apuesta al diálogo aún disponiendo de las mayorías necesarias para votar sus proyectos.

Pero lo cierto es que esas notables virtudes no tienen, en este caso, ninguna importancia. Si nuestros gobernantes toman la precaución de respetar el voto de las mayorías, con eso alcanza para ser democráticos. La Constitución no les exige creer nada en particular, como tampoco les impide ser soberbios o estar convencido de tener la verdad. Alcanza con que acepten las reglas del juego y, por supuesto, convenzan a las mayorías para que los apoyen.

La ausencia del voto popular en la larga perorata de esencias de la democracia con la que nos agobia nuestra Oposición Narosky apunta a construir legitimidad por fuera del apoyo de las mayorías. La legitimidad democrática estaría ligada, entonces, a cualidades más intangibles.

Una pista posible sobre esas cualidades es la que dieron los organizadores del Coloquio de IDEA que, a la vez que criticaron al gobierno por “querer imponer leyes”, propusieron que los candidatos aceptaran una serie de puntos como “políticas de Estado” que no dependerían del gobierno que se elija en el 2015. Es decir, políticas con coronita: definidas por gente que nadie votó, protegidas de los vaivenes electorales y a salvo de la voluntad popular.

La letanía de la Oposición Narosky, al incentivar la desconfianza hacia las mayorías, es un generoso elogio de la minoría ilustrada, del saber técnico exento de intenciones electoralistas y, en el fondo, de las virtudes del voto calificado. Todas caras de regímenes lejanos a la democracia a la que dicen aspirar. 

Paradojas de la Oposición Narosky.



Foto: El presidente Illia, electo por fuera de las mayorías, conversa alegremente el día de su asunción con las autoridades militares que lo derrocarán, demostrando que la democracia es diálogo pero también humildad, disenso y por supuesto, alternancia (cortesía Fundación LED para el Desarrollo de la Fundación LED). 
 

El dilema opositor





Columna publicada en Nueva Ciudad.

Los medios opositores describen desde hace años un país gobernado por Atila, un tirano cruel e inflexible que sojuzga a su pueblo y lo condena a la barbarie.

No se trata solamente de oponerse a iniciativas oficiales que no comparten sino de alertarnos cada semana- con precisión helvética- sobre la esencia nazi, estalinista, castrista o simplemente autoritaria, del gobierno.

No es algo nuevo. La prensa opositora denunciaba el autoritarismo oculto detrás de cada iniciativa del primer peronismo (como el voto femenino, el aguinaldo o las vacaciones pagas que hoy todos apoyamos) y, durante el alfonsinismo, alertaba sobre los depósitos de armas de la Junta Coordinadora Nacional.

No es tampoco un invento local. Según la prensa opositora más extrema, Obama es un fanático musulmán que busca instaurar el comunismo en EE.UU. y exterminar a los ancianos en centros de eutanasia pagados con fondos federales.

Apenas decidió presentarse a su reelección, Lula fue un alcohólico violento y un líder autoritario que la ciudadanía debía frenar a toda costa. Por no mencionar a Chávez, descripto por la prensa opositora venezolana como un extraño déspota antidemocrático que se dedicaba a ganar elecciones.

El diagnóstico apocalíptico no tolera matices. Si lo que padecemos es la dictadura de Pol Pot el rechazo debe ser absoluto. Analizar las iniciativas de una dictadura violenta en lugar de combatirla equivale a prolongarla innecesariamente. Tampoco importa definir con qué la reemplazaríamos, sólo urge reemplazarla.

El problema es que los medios exigen que los candidatos opositores compartan ese mismo diagnóstico y a la vez puedan ser una opción atractiva de gobierno. Es decir que denuncien eso que las mayorías no ven y logren, además, seducirlas. Una tarea no sólo titánica sino básicamente contradictoria.

El diagnóstico apocalíptico no carece de entusiastas. Losforistas de La Nación y los participantes de cada nuevocacerolazo sienten que muchas de los calamidades que describen los medios son reales. Algunos están sinceramente convencidos que un Ejecutivo con mayoría parlamentaria equivale a una dictadura o que la ausencia de conferencias de prensa nos condenaba a ser Corea del Norte (aunque la existencia actual de esas mismas conferencias no nos condene a ser Noruega). Viven en una indignación perpetua que sólo va modificando sus causas.

Pero así como son muchos ciudadanos, con muchos recursos y mucha visibilidad, son muy pocos electores, como lo demostró el 1,8% de votos que consiguió la Mentalista Carrió en las últimas elecciones presidenciales, luego de transformarse en su abanderada. Focalizar en ese electorado y creer que la visión de los medios es el sentido común de las mayorías es vitrificarse en una oposición eterna.

El gran acierto de Sergio Massa en las elecciones del 2013 fue intentar una oposición al margen del diagnóstico apocalíptico, ilustrada por la famosa ancha avenida del medio. La perogrullada de “mantener lo bueno y cambiar lo malo” fue, en el menu de opciones que ofrece hoy la oposición, una notable declaración de principios. A nadie se le ocurriría mantener algo de la dictadura de Pol Pot.

A un año de su lanzamiento, Massa diluyó ese perfil diferente y hoy compite en superlativos con los otros candidatos, prometiendo derogar más leyes en menos tiempo o juntando firmas para frenar nuevos códigos repletos de nuevas calamidades kirchneristas. Ese corrimiento ha permitido la asombrosa paradoja de que un opositor frontal como Mauricio Macri pueda ocupar la ancha avenida del medio- hoy vacía- y prometa que mantendrá gran parte de las iniciativas emblemáticas de estos doce años de gobierno kirchnerista, que desde hace diez años denuncia como autoriario.

El cambio de Massa refleja el dilema opositor en su conjunto: si los candidatos repiten el diagnóstico apocalíptico se quedan sin electores; pero si al contrario prefieren ejercer una oposición más matizada y- en el fondo- más política, se quedan sin medios.

Y sin medios los candidatos no logran hacerse conocidos ni difundir sus propuestas masivamente. Son invisibles.

Lo que implica, a la larga, quedarse sin electores.




Foto: En los estudios de TN, Massa, Macri, Sanz y Binner se comprometen a debatir en TN (cortesía Fundación LED para el Desarrollo de la Fundación LED).
 

Próxima Gran Cena de la MAK miércoles 5 de noviembre


Preocupado por este giro a la derecha que no logra seducir a la derecha, nuestro Maestro de Luz Elbosnio, el Sri Sri Ravi Shankar del kirchnerismo de salón, dio curso a la Secretaría de Guateques, Coffee Breaks y Peloteros (la ya legendaria SeGuCoBrePe, por sus siglas en inglés) liderada por Nagus el Magnífico para que organice la próxima Gran Cena de la MAK el miércoles 5 de noviembre, en honor a San Gerlaco, eremita cuya vida ejemplar lo iluminó en la suya.

El lugar es el habitual, el ya legendario Salón Dorado Horacito Rodríguez Larreta del Círculo Salvavidas, ubicado en Cabello 3958, barrio carenciado de Palermo, a las 20:00.

Como creemos en las tradiciones mantendremos el sistema lanzado en la última cena: se pagará una entrada única de $60, lo que dará opción a empanadas frozen, vino de ferretería y gaseosa tibia a granel.

Quienes a pesar de la crisis y del cepo a la esperanza dispongan de recursos extra, podrán negociar con Moni (del Círculo Salvavidas) el plato Super De Luxe Primera Especial, como milanesa, pechuga, ensalada y demás manjares.

Por razones de seguridad nos vemos en la obligación de mantener el santo y seña: "¡Qué desmejorado que está Elbosnio!". Oficiales de gendarmería lo exigirán a la entrada.

Foto: Durante la Universidad de Verano de la MAK, el General, Aberel y la Señora Bibiloni (en uniforme de fajina) prueban un nuevo dispositivo para amedrentar opositores.

Cortesía Fundación Led para el Desarrollo de la Fundación Led.
 

La Mentalista



Columna publicada en Nueva Ciudad.

Con un discurso delirante pero bien articulado que mezcla a Hannah Arendt con las lluvias de fuego inminentes, al Gordo Valor con los partos sin peridural -también inminentes- y a la Desatanudos con la República y los mandalas, la Mentalista logra electrizar a su audiencia; una virtud poco frecuente entre los líderes opositores.

Ese carisma y el generoso apoyo mediático con el que suele contar no necesariamente se traduce en peso electoral (recordemos que entre su candidatura presidencial de 2007 y la del 2011 perdió 4.000.000 de votos, es decir, el 90% de su electorado) pero sin duda la transforma en una jugadora política insoslayable. Posee, además, un notable poder de construcción -como lo demuestran el ARI, la Coalición Cívica, el más efímero Movimiento Humanista de Resistencia y Construcción y también su última co-creación, el multimarca UNEN- sólo superado por su extraordinario poder destructivo. Ella es el único jugador que permanece en pie luego de cada nuevo y esperado tsunami.

Su gran versatilidad le permitió, en unos pocos años, transformarse de aquella pasionaria que junto al economista heterodoxo Rubén Lo Vuolo denunciaba a bancos y multinacionales y exigía mayor regulación estatal, en esta señora bien que denuncia el Estado depredador y pide eliminar las retenciones y reemplazarlas por “deuda legítima” junto a Alfonso Prat Gay, en una reedición de la Teoría del Derrame pero en clave moral.

De definir las alianzas en base a fronteras honestistas (“Mi límite es Macri”) pasó a proponer acuerdos con fines explícitamente electoralistas (“Si no vamos con Macri gana el PJ”).

Puede aliarse con cualquier partido o candidato opositor, eludiendo siempre el fastidio de las definiciones políticas y “reemplazando la imprecisión por énfasis” (parafraseando lo que escribió José Natanson sobre Pino Solanas).

Frente a ese enorme magnetismo, la oposición y en particular la UCR, no logra definir una estrategia clara. Pasa de la burla y el desprecio al pedido de ayuda, de la tolerancia al odio y luego nuevamente a la tolerancia.

Muchos acuerdan que no es una socia confiable pero todos saben que es una adversaria despiadada. En la política espectáculo no tiene parangón, arma y desarma acuerdos desde los medios, hace denuncian judiciales o llama a conferencias de prensa para anunciar calamidades inminentes aunque siempre esquivas.

Contradice a sus socios y reniega con pasión de eso que hasta ayer defendía con ahínco. No acepta otra autoridad que la suya y sabe que sus seguidores no esperan de ella coherencia política ni proyectos de gobierno sino visiones apocalípticas que confirmen las suyas: – ¿Qué ve, Elisa?, llegó a preguntarle Marcelo Bonelli, oficiando de asistente pitoniso.

Su alergia a la gestión ejecutiva es sólo comparable a su aversión a la negociación parlamentaria. Su tribuna está en los medios y en la fiscalía, no en el Congreso ni en el partido. Su liderazgo no tiene militancia ni otro territorio que el que delimita el decorado de un estudio de televisión. Suele apadrinar a jóvenes dirigentes que luego suelta en el vacío de sus explosivas decisiones tácticas.

Como en todo relato anti-político, el drama es el gobierno, una asociación ilícita dedicada al robo a gran escala y en el fondo a la maldad planificada. Su antídoto es la Virtud, encarnada en una heroína mítica que resiste contra todas las presiones, llora en directo, anuncia catástrofes terminales aunque luego nos tranquiliza diciéndonos que vamos a estar bien. En sus análisis nunca hay factores de poder ni conflictos de intereses que la política debería regular, sólo demonios desatados por una pareja presidencial que destruyó el equilibrio de un país tradicionalmente manso, que hasta el 2003 resolvía sus conflictos con la parsimonia de un cantón suizo.

La Mentalista es el narcótico de la oposición. Su consumo mejora el presente, aporta presencia en los medios, suma apoyos indignados y acerca consignas atractivas y denuncias proféticas. Pero al mismo tiempo esteriliza toda vocación de poder, condenando a sus adictos a la irrelevancia enfática y la minoría eterna.

No es un mal futuro para una estrella de la telepolítica. No parece ser un destino soñado para un gran partido popular, en particular si además es centenario.


Foto: un grupo de militantes de la Mentalista desmienten su no existencia durante un simpático té canasta (gentileza Fundación LED para el Desarrollo de la Fundación LED).
 

El relato del No-Relato



Columna publicada en Nueva Ciudad (¡Mamá, soy columnista!)

 
Hace uno días el PRO presentó La Vía PRO, una mezcla de manual de estilo y Libro Rojo del macrismo, que, con simpatía y liviandad, explica su voluntad de lograr la felicidad del vecino prescindiendo de ideología.

Más allá de la dificultad de imaginar un partido sin ideología -es decir, sin ideas articuladas entre sí y sin una visión de la realidad un poco más compleja que lindo / feo- el manual es coherente con el relato del PRO. Utilizo Relato para retomar no sólo un término muy en boga sino, en rigor de verdad, para resaltar el relato duranbarbista del No-Relato, corolario de la ideología de la no ideología.

Según el No-Relato, la felicidad se obtendría con diálogo y buena onda; buscando, entre todos, las soluciones adecuadas; enriqueciéndonos con las diferencias y eludiendo como al ébola la confrontación que incentiva el gobierno nacional.

El PRO aprende de sus errores: la idea de La felicidad está al alcance de la mano del vecino pareciera superar a la de ciudadano, condenado a no encontrarla, perdido entre la intolerancia y la desidia.

La sonrisa Colgate de Mariú Vidal reemplazó al fascismo explícito de Posse y las patotas de la UCEP, al menos en los titulares. Una serie de confortables carriles exclusivos para colectivos ocultaron los 70 km de subtes nunca construidos. Las plazas renovadas y la alegría masiva de los recitales dejaron en segundo plano hospitales y escuelas a la intemperie. La inoperancia, la imposibilidad de hacer, parece transformada en virtud.

El discurso del PRO mide la política por su componente instrumental. Ese entusiasmo por la Heidipolitik es compartido por gran parte de la oposición, pero el PRO tiene la dificultad suplementaria de tener que, además de enunciar principios tan virtuosos como inaplicables, administrar un distrito.

El No-Relato ayuda a que un Jefe de Gobierno con 120 vetos en su haber pueda elogiar las virtudes del consenso sin sonrojarse; mientras que sus ministros se dan el lujo de condenar el capitalismo de amigos al tiempo que adjudican obras a Nicolás Caputo, cofundador del PRO, amigo personal de Macri y su asesor hasta el 2008.

El PRO es la construcción conservadora más exitosa de los últimos años porque, a diferencia de los intentos anteriores, logró dejar de lado un tenaz antiperonismo. Junto a los simpáticos cursos de entusiasmo de Alejandro Rozitchner, el PRO tiene a Cristian Ritondo asegurando el sur de la Ciudad. El No-Relato permite articular a una Michetti -pasionaria de las Señoras Bien- con el PhD en Rosca Diego Santilli y, a ambos, con un conservador lúcido como Federico Pinedo.

Algunos marcarán que el No-Relato se beneficia de un generoso apoyo mediático. Es cierto, pero ese apoyo no difiere demasiado del que recibieron todas las anteriores esperanzas blancas -desde Sobisch, hasta De Narváez, pasando por López Murphy o Cavallo- que, sin embargo, fracasaron.

Desde los recitales masivos (antes Violetta, en unos días Ricky Martin), hasta el mobiliario urbano del Metrobus. Desde las cajitas amarillas con bolsitas para la caca del perro entregadas en los edificios hasta las Estaciones Saludables -también amarillas- de las plazas. Desde las pantallas con videos de Horacito Rodriguez Larreta en loop en estaciones de subte y salas de espera de hospitales hasta la Usina de las Artes, el PRO vive comunicándose con su electorado desde hace 7 años, en campaña permanente.

A diferencia de Elisa La Mentalista Carrió o Pino, senador por TN, Macri es dueño de sus votos. Conoce a su electorado, sabe cómo hablarle, tiene un liderazgo indiscutido en su partido y consigue el milagro de independizarse de su limitada gestión, logrando posicionarse como candidato incluso a nivel nacional. No es seguro que esto alcance fuera de la General Paz, pero hoy está claro que es el dueño político de la Ciudad de Buenos Aires.

El desafío de las fuerzas políticas que busquen superar el No-Relato del vecino feliz comienza por comprenderlo en lugar de despreciarlo, por dejar de lado el prejuicio del elector del PRO como un tipo con campera Cardon que veranea en La Barra y añora la Dictadura, y por recrear un relato que ponga en el centro al ciudadano, con sus luces y sombras.


Foto: Participantes saliendo del Taller de Entusiasmo de 
Alejandro Rozitchner (cortesía Fundación Led para el Desarrollo de la Fundación Led).





 

Próxima Gran Cena de la MAK (Silvina Batakis)


Preocupado por este gobierno que apoya al establishment sin lograr que el establishment lo note, y lanza iniciativas marxistas que no entusiasman a los marxistas, nuestro Maestro de Luz Elbosnio, el Sri Sri Ravi Shankar del kirchnerismo de salón, dio curso a la Secretaría de Guateques, Charlas Motivacionales y Bautismos (la ya legendaria SeGuChaMoBa, por sus siglas en inglés) liderada por Nagus el Magnífico para que organice la próxima Gran Cena de la MAK el miércoles 1 de octubre, en honor a San Romano de Melodo, diácono cuya vida ejemplar lo iluminó en la suya.

La Gerencia de Invitados Ilustres (la célebre GIL) decidió consolidar su trayectoria de éxitos ininterrumpidos con la presencia de Silvina Batakis, ministra de Economía de la provincia de Buenos Aires, apadrinada por el amigo Mus, quien envalentonado por la visita prometió incluso hablar.



El lugar es el habitual, el ya legendario Salón Dorado Horacito Rodríguez Larreta del Círculo Salvavidas, ubicado en Cabello 3958, barrio cacerolero de Palermo, a las 20:00

Como crecer es cambiar y lo que sucede conviene, hemos dispuesto un cambio radical- con perdón de la palabra- en el sistema de cobranza: se pagará una entrada única de $60, lo que dará opción a empanadas frozen, vino de ferretería y gaseosa tibia a granel. 


Quienes a pesar de la crisis dispongan de recursos extra, podrán negociar con Moni (del Círculo Salvavidas) el plato Super De Luxe, como milanesa, pechuga, ensalada y demás maravillas.


Por razones de seguridad nos vemos en la obligación de mantener el santo y seña"¡Qué desmejorado que está Elbosnio!"Se la exigirá a la entrada, esta vez sin excepciones. 



Foto: En el Centro de Entrenamiento Néstor Carlos Kirchner, el General (parado, con bombo y uniforme makista reglamentario) enseña a nuevos reclutas el arte de amedrentar opositores (cortesía Fundación Led para el Desarrollo de la Fundación Led).