Grupo de autoayuda para quienes padecen ciertas molestias ante
comentarios Anti-K, o incluso descubren alguna tolerancia al peronismo.

La crónica de la semana: de maras, Bela Lugosis y sueldos confortables


Promediamos otra semana trepidante en la que no tuvimos noticias de la lluvia de inversiones pero tampoco de la Pobreza Cero; es decir, una de cal y otra de arena. Según nuestros economistas serios, estamos mucho mejor de lo que pensamos y en eso debemos confesar que hemos dado un gran paso hacia delante: hace tan solo nueve meses esos mismos economistas serios sostenían que estábamos mucho peor de lo que creíamos. Además, en aquella época lejana, éramos víctimas de la impericia del gobierno, mientras que ahora sólo padecemos condiciones externas poco favorables. Cambiamos.

Fueron días asombros en los que todavía resuenan las notables recomendaciones del secretario de Seguridad Interior Gerardo Milman, no para cazar pokemones sino para detectar maras: hay que estar atentos a los tatuajes y los peinados excéntricos. Esas simples directivas habrían permitido arrestar a casi 50 jugadores de fútbol y otros tantos estudiantes de artes del circo. Para no ser menos que su subordinado, la ministra Bullrich apresó a un terrorista libanés que no sería libanés ni tampoco terrorista pero sí estaría apresado. Por su parte, el secretario Burzaco alertó sobre“argentinos formados en ISIS” pero luego lo desmintió. Las acechanzas del mundo son temibles y aunque por ahora el único encarcelado sea un tuitero adolescente, debemos confesar que nos sentimos más seguros. Como gesto de eficiencia, el ministerio de Seguridad prepararía un cronograma de arrestos fallidos para que podamos burlarnos de manera ordenada.

Esta semana también supimos gracias al jefe de gabinete Marcos Peña que no hay recesión, y gracias al ministro de Hacienda Alfonso Prat Gay que, además, es heredada. Es una situación similar a la de los despidos que iban a cesar y, según el ministro de Modernización (SIC) Andrés Ibarra, “no serán tantos”.

De la misma forma, para el ministro de Producción Francisco Cabrera, los empresarios no son responsables de la inflación mientras que su colega Prat Gay propone un acuerdo con esos mismos empresarios para controlarla.

En realidad, la del gobierno de Cambiemos es la famosa política de Schrödinger, es y no es a la vez.

Muchos recordamos con cierta nostalgia la época en la que las imputaciones y allanamientos al vicepresidente eran dramas morales inaceptables. Hoy eso cambió, por lo que el periodismo serio no se indignó por los allanamientos a la fundación de Gabriela Michetti ni por su imputación. Incluso una política intachable como Margarita Stolbizer explicó que no se puede comparar con las sospechas sobre el gobierno anterior. Es cierto que Michetti puede ser acusada de muchas cosas pero no de ser kirchnerista.

"Hoy estamos mucho mejor que hace un año”, concluyó Stolbizer. Consideramos que seguir negándole una subdirección de algo o un consulado es no sólo injusto sino también contrario a la meritocracia tan proclamada por el gobierno.

Por estos días también pudimos leer una solicitada firmada por las fuerzas vivas del país, exigiendo la remoción del juez Rafecas. El almirante Rojas lamentó no poder firmar el documento "por razones de público conocimiento" pero Freddy Krueger y Bela Lugosi enviaron una participación. También firmó Pilar Rahola, la ISO 9001 de la bobería reaccionaria. Lo más extraño es que la razón del pedido es el fallo del juez sobre la denuncia de Nisman, que fue ratificado por la Cámara Federal y el caso archivado por una sala de Casación. Es decir que no sólo Rafecas debería ser apartado. Algunos mal pensados sostienen que se trata de un apriete a los camaristas Ballestero y Freiler,que citaron a una audiencia para analizar el pedido de reapertura de la denuncia de Nisman, pero esos son detalles leguleyos, lo importante es que los firmantes ya tienen a la culpable y sólo reclaman un juez idóneo que la condene.

Para coronar la semana y en otra muestra de independencia de los medios, Carlos Pagni se enojó con Daniel Arroyo, político del Frente Renovador, por criticar las políticas del gobierno pese a haber sido nombrado en el directorio del Banco Provincia “con un sueldo confortable”. Al parecer, para el célebre columnista, un puesto de director de un banco estatal debería canjearse por silencio.

Todo lo que quieran, pero ya no le tenemos miedo al censista.

Foto: En el Centro de Cómputos de la MAK, Mabel y la Señora Bibiloni entran los datos de las maras venezolano-iraníes con formación en Cuba Libre (cortesía Fundación LED para el Desarrollo de la Fundación LED).
 

El genocidio de la lógica



Columna publicada en Nueva Ciudad.

En mayo del 2003, unos días antes de que Néstor Kirchner asumiera como presidente, Claudio Escribano escribió en La Nación “la Argentina ha resuelto darse gobierno por un año”. El vaticinio erró por once años pero el tono de la nota fue premonitorio. A partir de la primera presidencia de CFK, los medios opositores optaron por un periodismo de guerra con ese mismo enojo y desprecio y el mismo anuncio de apocalipsis inminentes, aunque siempre esquivos. 

Para Marcos Aguinis, por ejemplo, CFK era peor que Hitler; para otros era peor que Stalin, Mussolini o Pol Pot. Los diagnósticos podían divergir, por ejemplo que el exceso de Estado ahogaba la iniciativa privada o, al contrario, que su ausencia dejaba a la ciudadanía a la intemperie; pero la causa era la misma: el autoritarismo de un gobierno desbocado. El análisis político fue reemplazado por la furia moralista. Ya no importaban las iniciativas del gobierno y sus consecuencias sino sus intenciones, siempre satánicas. Las denuncias de corrupción fueron la amalgama que logró dar una cierta coherencia a críticas muchas veces contradictorias.

Los políticos opositores optaron o se vieron forzados a retomar ese tono apocalíptico a cambio de visibilidad mediática. Así, algunos que criticaron durante años el freno a los juicios por crímenes de lesa humanidad durante la Dictadura, no apoyaron su relanzamiento ("El kirchnerismo ensucia todo lo que toca" explicó el diputado Luis Zamora, quién votó en contra de las leyes de impunidad que siempre había denunciado para no votar junto a los kirchneristas). El radicalismo, que solía denunciar la estafa legal de las AFJP, se opuso a su eliminación por las malas intenciones que detectaba en CFK.

Luego de descubrir con asombro que Néstor Kirchner no era Camilo Cienfuegos, Libres del Sur se distanció del FPV y formó alianzas con la UCR y la Coalición Cívica, hoy socios de Cambiemos. El mínimo común denominador de esas miradas políticas divergentes era el antikirchnerismo y su corolario necesario: la bomba a punto de estallar. El modelo kirchnerista tal vez ofrecía un presente pasable pero no era sustentable en el tiempo y más temprano que tarde el país volaría por el aire, víctima de la corrupción y el autoritarismo.

Pero la bomba nunca estalló.

Con el kirchnerismo en la oposición la letanía tuvo que cambiar. Ya no se trata de anunciar un futuro calamitoso sino de explicar que el pasado fue en realidad atroz. La honestidad brutal de un González Fraga ("le hicieron creer a un empleado medio que su sueldo medio servía para comprar celulares, plasmas, autos, motos e irse al exterior. Eso era una ilusión. Eso no era normal") ya no alcanza.Margarita Stolbizer, una extraña diputada opositora que se opone más a la presidenta anterior que al actual, denunció el “genocidio social” que dejó el kirchnerismo. Al parecer, a la vez que ofrecía a las mayorías un poder adquisitivo tan alto como ilusorio, CFK las exterminaba.

Que ningún indicador social corrobore la afiebrada afirmación de la diputada no tiene importancia. El objetivo es apuntalar el enojo y el desprecio que ya desbordaban de la columna de Escribano, aunque sea a costa del genocidio de la lógica. Ese es el cemento del antikirchnerismo que permitió, por ejemplo, que el trotskista Néstor Pitrola criticara a CFK porque los sueldos bajaban y que Cristiano Rattazzi, presidente de Fiat, la denuciara porque subían, pero que ambos acordaran en lo esencial: CFK era lo peor. No hay nada nuevo en eso, el cemento del antiperonismo permitió que en un mismo frente convergieran los socialistas a quienes Perón les había "robado" las leyes laborales junto a los conservadores que las detestaban y que todos apoyaran un golpe para defender las instituciones.

Así como la primera víctima del periodismo de guerra es el lector la primera víctima del genocidio de la lógica es la política.

Foto: dispositivo para eludir los fastidios de la lógica (cortesía Fundación LED para el Desarrollo de la Fundación LED).
 

Próxima cena de la MAK el miércoles 7 de septiembre de 2016


Preocupado por la proliferación de maras y la negativa del fantasma de Cristina a permitir la llegada de inversiones, nuestro Maestro de Luz Elbosnio, el Sri Sri Ravi Shankar del kirchnerismo de salón, dio curso a la Secretaría de Guateques, Cha Cha Cha y Disco, Baby, Disco (la ya legendaria SeGuChaDis, por sus siglas en inglés) liderada por Nagus el Magnífico para que organice la próxima Gran Cena de la MAK el miércoles 7 de septiembre, en honor a San Hilduardo de Flandes, mártir cuya vida ejemplar lo iluminó en la suya.

La Gerencia de Invitados Ilustres (la célebre GIL por sus siglas en inglés) decidió brillar por una vez e invitó a la compañera Silvina Batakis. Asombrosamente, ella aceptó.

En honor al amigo Miguel "Tu tu tu" Braun, hemos decidido mantener el precio del Menú Alegría por cuarta vez consecutiva. Como dijo el imaginativo Prat Gay, la inflación ya no es un problema, así que por tan solo $100 se podrá comer empanadas frozen y vino de ferretería tibio o gaseosa sin gas. Los gustos nos los damos en vida.

Quien disponga de recursos extra podrá pedir directamente al Círculo Salvavidas el plato Súper De Luxe Primera Especial, como milanesa, pechuga, ensalada y demás manjares.

El lugar es el habitual, el ya legendario Salón Dorado Horacito Rodríguez Larreta del Círculo Salvavidas, ubicado en Cabello 3958, barrio carenciado de Palermo, a las 20:00. 

De 19:00 a 20:00 estaremos transmitiendo la Radio MAK en el mismo lugar, con rifas, sorteos, carreras de hamsters, cursos de crealina, clases de rikudim y muchas sorpresas más.

Por razones de seguridad nos vemos en la obligación, hoy más que nunca, de mantener el santo y seña: "¡Qué desmejorado que está Elbosnio!". El Rincón de Milman lo exigirá en la entrada.

Foto: en el último Congreso de Actualización Doctrinaria de la MAK, el General (en el centro, con anteojos) enseña a los nuevos reclutas a amenazar oficialistas (Cortesía Fundación Led para el Desarrollo de la Fundación Led).