Así fue la Gran Cena de la MAK
MAKfina. Su Sintonia Fina.
La sintonía fina fue aplaudida por todos, porque cada uno tiene su lista y considera que la presidenta finalmente lo entendió y alude a ella cuando habla de sintonía fina.
Al igual que el Gran Joaquín, que sabe con qué sueña la presidenta y sabe que sueña con lo mismo que él sueña, en la MAK sabemos que ELLA nos sigue, o sigue a quien nos sigue, y por eso entendemos a qué se refiere cuando habla de sintonía fina.
Habla de nuestra lista y, como Joaquín con sus sueños, nos sentimos en la obligación de comunicarla para que los demás sepan también a que se refiere.
Listado de Sintonía MAKfina, sin orden de importancia y con algunas sintonías gruesas filtradas por ahí que ya mencionamos en nuestro post de agenda 2011-1015:
- Los dividendos tributarán ganancias. Quizás algún beneficio parcial para quien reinvierta el dividendo en otra SA nacional.
- La herencia, las ganancias de capital y financieras tributarán impuesto a las ganancias personales.
- Aumentará la alícuota máxima del impuesto a las ganancias personales con la creación de nuevos escalones superiores. (llegará a un Europeo 50%?).
- Ajuste de las valuaciones fiscales de campos hasta valor comercial. Aumento del impuesto inmobiliario y de las tasas municipales.
- Los dólares provenientes de la compra de títulos en argentina (en pesos) y venta en exterior (en us$) (el famoso contado con liqui) deberán liquidarse a través del BCRA, como cualquier exportación (aun de intangibles como un software o un diseño).
- Se limitará la distribución de utilidades para el caso de empresas con posiciones dominantes en su mercado. (No solo las privatizadas). Lo que obligará a reinvertir utilidades a empresas a las cuales la competencia no las obliga.
- El ejecutivo hará fuerte lobby por la AFIP en tribunales (Guillermo Moreno?). No puede ser que Eurnekian y su avivada de una donación a un fideicomiso en el exterior, le gane a la AFIP en nuestros tribunales.
- Se obligará a que la compra de inmuebles por mas de 1000$ no pueda ser hecha al contado, solo transacciones bancarizadas. Que cumpla la ley y que los escribanos no hagan de testaferros de sus clientes.
- Construcción de la Red Postnet popular. Que cada negocio tenga su procesadora de dinero electrónico, aun para pequeños comercios y ambulantes. Bajas comisiones y sin fijos.
- Se generalizará el SUBE como tarjeta de debito popular.
- Se publicará el ranking y listado de las personas físicas y jurídicas con cuanto pagan de ganancias. El secreto no aplica a las expensas de Nordelta, porqué aplicaría a las de La Nación?
- Las empresas de gran tamaño no listadas en la bolsa deberían cumplir las mismas exigencias que impone la CNV a las listadas.
- Se creará el ministerio de la competencia. Una Nilda Garre contra el abuso de posiciones dominantes. Usar la competencia como un atenuador de la inflación y un estimulo a la inversión defensiva de las empresas.
- Se lanzará una campaña de democratización de los tribunales. Para que ingrese, de algún modo, la cultura de la época y alguna revalida periódica de lo actuado frente al soberano. No solo cambiar jueces por delitos sino por no representar a la ciudadanía a nombre de la cual juzgan.
- Se garantizará, por ley y por acción policial, la libertad de las embarazadas para decidir si prosiguen o no con sus embarazos.
- Se legalizará la producción de drogas listadas como ilegales por la DEA en EEUU. Con un fuerte control del estado en la calidad y en la distribución. Gratuidad de la entrega a adictos para quienes la necesidad es incontrolable por la voluntad.
- Se prepara una lluvia de créditos a Pymes. Con solo el DNI del director o gerente, una pyme se llevaría su crédito. Se rompería con la lógica mercantil del préstamo a pyme.
- Se prepara una lluvia de viviendas. Plan "los pies dentro del plato". Todo argentino tendrá su vivienda en un horizonte de 10 años.
- Limite a la valorización de la tierra urbana. Fuerte impuesto al incremento del precio del terreno.
- Se instauraran una serie de estímulos a la construcción de viviendas populares en barrios de clase media, para evitar la gettificacion de la ciudad.
- Se finalizará la exención fiscal para los free shops.
- Se le aplicará IVA y retención de ganancias a todos los gastos del exterior procesados por tarjeta de crédito no presencial (Debitos automáticos y por Internet).
- Aerolíneas Argentinas lanzará una línea fluvial al Uruguay para competir con Buquebus.
El parecido entre esta lista de lo que la presidenta piensa cuando habla de sintonía fina y mis propias minúsculas obsesiones no invalida la seriedad de la lista.
Y si la presidenta decide no llevar a cabo esta sintonía MAKfina, sabremos que la Argentina ha resuelto darse gobierno por un año mas.
Cenando con Gabi Cerruti
Un Subsidio Transparente. E insípido.
Es un subsidio costoso, en dineros y en recursos naturales. Es un subsidio que invita e incentiva el derroche, de un producto con alta elasticidad en la demanda (no como el subsidio al subte del que uno no puede abusar mucho, mas allá de los 50 o 100 viajes diarios, sin peligro de mareos y afanos).
Desde 1892 la Nación asumió la responsabilidad del saneamiento urbano, a su entero costo y bajo su gestión directa, después de varios intentos y un fracaso con la Buenos Aires Water Supply and Drainage Company Limited, empresa de nombre confiable (Reliable en su acepción en ingles) pero resultado desastroso.
La Nación, no la de papel sino la de verdad, tenía entonces poco interés por cumplir rituales populistas a los que se haría adicta recién con Yrigoyen y Perón. Pero fueron “iluminados” por dos flagelos, quizás solo comparables al matrimonio Néstor y Cristina Kirner, las epidemias de Cólera y de Fiebre Amarilla.
Los dueños de entonces rápidamente entendieron que la fiebre amarilla, a diferencia de la pobreza, la desnutrición o el analfabetismo, se transmite a personas de clases sociales protegidas y no puede detenerse con alambres olímpicos, ni con el equipo de seguridad del country Carmel.
Los ricos de entonces no estaban condicionados por la plebe popular, ni atemorizados por el bisabuelo de Moyano. Eran, podríamos decir, libres. Y libres como eran, pagaron por la inversion y por el servicio. Y libres como eran, lo plantearon universal.
Alzaga Unzue recibiría agua corriente y potable al mismo precio que el tatara abuelo de Rinconete.
Se podría argumentar que de haber escrito Joaquín Morales Sola y Mariano Grondona en las paginas de Mitre de la época o si la política hubiese tenido a próceres de la talla de Sanz o de Lopez Murphi, Alzaga habría tenido que pagar el agua a su verdadero costo y el Tataranete, con un simple tramite en la administración publica, habría recibido una ración justa de agua que le permitiría, a juicio de Sanz, higienizarse sin vertirla por la canaleta de la AUH.
Quien sabe, de haber sido así la historia, el Cólera no seria hoy una especie en peligro de extinción, como si lo es el Gorila Occidental (Gorilla gorilla) y otros gorilas tambien.
Pero es innegable el éxito del plan, el Cólera se acabó en las zonas con redes de agua corriente y ningún gobierno posterior eliminó el subsidio, ni le aplicó "razonables" controles para que los herederos de los Alzaga Unzue no sigan pagándola a precios de inmigrante. Al menos hasta la llegada de Carlitos el terrible y su fiel ayudante Bernardo (o era al revés?).
Los subsidios sólo son criticables antes de ser considerados derechos y, sobre todo, antes que sus efectos positivos sobre la sociedad sean ya naturalizados.
Hoy nadie se anima a objetar el subsidio al agua potable, ni a la inversión estatal en ampliación de redes. Ni siquiera los obispos que se niegan a regalar preservativos para combatir el sida se atreverían a sugerir la abstención de tomar. (O, quizás, sólo ellos).
Nadie se atrevería a sugerir enquilombar todo para que los Unzue paguen lo que puedan por el agua o tan solo un precio de mercado. (Cuanto sería el precio a pagar por un bien como el agua potable, con un proveedor monopólico? )
Por suerte en los años de instalación de este insípido subsidio, la clase política argentina, la democrática, la protodemocratica y la antidemocratica, supieron defender su valor. No aceptaron atajos, no crearon racionamientos ni intentaron filtrar su acceso para evitar el suministro a vivillos que podrían pagarla a precio de mercado. La clase política la regaló, la despilfarró, regó la ciudad con ella, toleró ver a los Unzue llenando piletas y piletas, toleró ver al Rincoabuelo limpiando su vereda con agua potable y muchas mas muestras de riqueza. Gracias a esa tolerancia, la fiebre amarilla se mudó alejándose de las redes de agua corriente y la higiene escaló a niveles que no se conocieron en Europa hasta muy avanzado el siglo XX (siendo generosos con Europa).
Si aún hoy, no todos los chicos de la argentina consideran el agua potable como un derecho elemental al que están acostumbrados, es porque en algún momento la clase política comenzó a utilizar la razón mercantil en lugar de la razón de estado.
La razón de estado no se pregunta cómo hacer la acción de estado unos mangos mas barata o mas eficiente. La razón de estado solo se pregunta cómo la financiará y como garantizará su eficacia. (Eficacia o Eficiencia?)
(*) Para aquellos que no asistieron a la escuela pública (pública francesa), Rantanplan era el perro de Lucky Luke. Un sabueso muy útil para perseguir a los Dalton porque indicaba exactamente la dirección opuesta a la que habían huido. La clase Rantanplan nos muestra así, si comprendemos su juego especular, la dirección política a seguir. Si critican vamos bien, si aplauden es un llamado de atención.
Subsidios. El primer FastBlog de la MAK
Rinconete, en uno de sus encuentros con el sentido común, consideró que si quisiéramos parecernos a la marca de los arcos de oro, deberíamos comenzar por copiarles el producto. Así surgió la idea del FastBlog, blogs a pedido, que salieran rápido, muy económicos, con el único limite de no causar indigestión en cantidades menores a uno.
Ayer a medianoche un comentarista sorteado al azar, por la comisión de encuestas y azar de la MAK, nos pidió un Post sobre los subsidios. En menos de 24 horas, trabajando alrededor del reloj (porque de noche nos reunimos en la torre de los ingleses) ya tenemos un post escrito por nuestro corresponsal en Nueva York (Ver post original), el indignado Pablo Krugman (predatado por un tema fiscal. Pablo quiere pasar los cheques de Aníbal correspondientes a este post en su declaración del año pasado. Recordemos que en EEUU los años comienzan en Julio, una prueba mas de lo adelantados que van).
En su post, Pablo K nos habla del “Mean Testing”, que es como allí nombran, quienes no hablan español ni gozan con el uso extensivo de su propio idioma, a la política de filtros que se busca imponer a las asistencias estatales para evitar que quienes no las necesiten las reciban.
Pablo K menciona las criticas usuales a los filtros. Que no ahorran mucha plata, porque son relativamente pocos los que podrían pagar mucho mas, y en cambio agregan un despelote de administración y obligan a una intromisión en la información de las personas, todo para modificar un sistema que ya funciona y lo hace de manera bastante simple.
Sugiere nuestro blogero de la US-MAK que si lo que se buscase fuese hacer pagar a los ricos por los servicios que reciben inmerecidamente, bastaría con subir los impuestos.
Pero aquí aparece, según él, una profunda diferencia entre subir impuestos y eliminar subsidios. Un aumento de impuestos subiría enormemente la tributación de los inmensamente ricos, aunque muy poco en los apenas ricos, como los camioneros de Moyano (Hoffa en ingles). Los inmensamente ricos ciertamente prefieren que les cobren el tranvía a valor de mercado, sea cual sea este, a que les suban los impuestos a la ganancia o se los apliquen a la herencia, porque de este modo recaería sobre ellos prácticamente todo el costo del tranvía.
Aquí unos agregados de la filial Buenos Aires.
Si subsidiar es “bancar” desde el estado para que un usuario pague menos de lo que debería pagar sin ese banque, deberíamos reconocer que nuestro estado, y los del mundo en general, subsidia plazas, playas, calles, veredas, embajadas, espectáculos, el Colon, la seguridad, la escuela, la iglesia, la administración del transito e infinidad de cosas mas. Todas cosas que si cada interesado o usuario debiera pagarlas, las pagaría mas de lo que las paga hoy que es cero. Probablemente el costo por usuario del rosedal de palermo sea algo mas elevado que el del indoamericano y ambos, gracias al subsidio, todos lo recibimos a los mismos cero pesos.
Además la propia definición de subsidio parte de un concepto de “precio de mercado” como de un “valor justo” que tiene una cosa, un valor que define Dios. Pero en cualquier país ese precio de mercado depende mucho de las acciones políticas que lleva a cabo el estado, de su intromision en la tasa de interés, en la política de endeudamiento, en políticas aduaneras, salarios, de cobertura salarial, de represión o no a las acciones sindicales, etc.… Todas estas acciones que tendrán ganadores y perdedores y que empujaran el “precio justo” hacia un lado o hacia otro, tienen el mismo efecto final del tan publicitado subsidio.
Los estados intervienen así desde mucho antes en el precio de las cosas. Las penaliza y subsidia de mil maneras y en todos los casos hay “penalizados” y “beneficiados”. El usar dinero recaudado para bancar un ticket de subte, es solo una de las formas de intervenir, la mas visible, la mas contabilizable, podriamos decir la mas transparente.
Entre tantas formas de operar sobre el precio justo, entre tantas cosas que el estado banca, porqué la reacción de la clase acomodada se focaliza en transporte y energía? Porqué nadie protesta por los bosques de Palermo, por la plaza Alemania, por el espectáculo de Placido Domingo en la 9 de Julio donde muchos de los asistentes podrían haberse pagado un placido espectáculo en el Gran Rex?
En nuestra opinión es por el éxito que han tenido estos subsidios en llegar a la gente que menos los necesita. (Menos los necesita porque, como sostiene mi tía Chola, han pasado ya tantas generaciones sin recibirlos y han sobrevivido, incluso se han multiplicado, que queda claro que no lo necesitan. En cambio muchos de nosotros no podríamos vivir sin el Colon a bajo precio, al que ya consideramos como un derecho humano).
Los subsidios K, al igual que el subsidio al agua potable (al que hoy nadie se anima a objetar pero seguramente recibió las feroces criticas hace un siglo del abuelo de Mariano Grondona), han sido peronistamente exitosos. Han impactado en la vida de los que menos tienen. Algunos acomodados nos hemos beneficiado también, pero evitar esos “colados” obligaría a operaciones de cirugía fina que ni este gobierno ni los europeos han intentado. Es mucho mas simple subir los impuestos y que los acomodados paguen por el subte que utilizan y por el que no utilizan tambien.
Los subsidios que deberíamos eliminar son el subsidio a la herencia, a los dividendos, a las ganancias de capital y el subsidio a las ganancias extraordinarias.
La consagración del MAKnual
Eficacia y eficiencia
Quienes somos periódicamente desasnados por ingenieros, sabemos que eficiencia y eficacia no son sinónimos. La eficiencia se interesa por los recursos mientras que la eficacia sólo se preocupa por los resultados.
Es por eso que el Estado tiene la obligación de ser eficaz pero puede darse el lujo de no ser eficiente (es decir, puede matar moscas a cañonazos pero no puede no matar moscas).
El ejemplo que elbosnio, nuestro Maestro de Luz, el Sri Sri Ravi Shankar del kirchnerismo de Salón, suele repetir cada vez que alguien le pregunta su opinión (algo que gracias a Dios ocurre cada vez menos) es el de la vacunas. Si el Estado decide vacunar, por ejemplo, al 100% de una determinada población, su obligación es alinear los recursos para lograrlo. Si el responsable de llevar a cabo el plan de vacunación, digamos un cráneo de Harvard (con perdón del amigo Barban), informara al ministro responsable que gracias a la implementación de un sistema sumamente eficiente vacunó al 75% de la población utilizando sólo un tercio de los recursos asignados, el ministro responsable debería echarlo a patadas.
Sin embargo, por alguna extraña razón la derecha política suele focalizar en la eficiencia del Estado, logrando incluso que se transforme en una cualidad intrínseca al buen gobierno apoyada por casi todos (incluso tal vez por los padres de los 25% de chicos que quedaron afuera del plan eficiente de vacunación ideado por nuestro cráneo de Harvard, que recibiría el apoyo entusiasta de Mariano el Latinista o de Horacito Rodriguez Larreta, el hombre cuya extraña sonrisa le podría curar el hipo al Yeti).
Pensaba en todo esto cuando el otro día vi el programa de 678 dedicado a Aerolíneas Argentinas. Axel Kicillof, subgerente general de la compañía, Mariano Recalde, gerente general y el Secretario de transporte Juan Plablo Schiavi, explicaban los entretelones del conflicto con los pilotos. Me fastidiaron las críticas hacia ventajas sociales nimias como la exigencia de comida caliente o el privilegio para los pilotos de ser transportados en remise desde sus casas. Son argumentos microscópicos que le deberíamos dejar a Monner Sans, experto en nimiedades o a Lopez Murphy y sus amigos conservadores.
Pero me interesó Kicillof, cuando señaló que la empresa no es de los pilotos o de quienes la administran sino del pueblo argentino. Es una perogrullada pero conviene repetirla porque creo que ilumina la agenda que el gobierno debería empezar a estudiar.
A lo que quiero llegar es que, asegurados o al menos mejorados los objetivos, es el momento en el que el gobierno debería discutir sobre los recursos. Algo de esto conversamos al hablar de la agenda 2011-2015 y sobre todo de la reforma educativa con la que soñamos. Esa que inevitablemente generará enfrentamientos con los sindicatos de trabajadores de la educación (tema que Mabel conoce mejor que yo) que muchas veces consideran que ¨son¨ la educación o al menos que son quienes deberían fijar los objetivos de la educación y los métodos para lograrlos, como los pilotos de Aerolíneas creen que son los más capacitados para administrarla ya que en el fondo ¨son¨ la empresa.
Controlar, capacitar, fijar objetivos, implementar incentivos, son tareas que el gobierno puede empezar a llevar a cabo justamente porque tuvo éxito en el dial grueso, en las decisiones acertadas que nos permitieron salir del incendio.Filantropía, Noble Tiranía.
El gran William “Bill” Gates (Guillermo "Memo" Puertas como se lo conoce en los países hispano parlantes) nos recomienda, desde su natural pulpito del G20, no olvidarnos de los países pobres. (Ver Nota)
Todos suspiramos agradecidos al ver que un tipo que podría estar rompiendo la noche en Mau Mau, consumiendo vino de marca (y quien sabe que otros lujos mas) en cambio milite activamente por los países mas pobres del mundo, aunque lo haga con la efectividad de esos carteles en la vía publica que nos advierten "La droga es Mala para la Salud". Quien sabe, quizás alguno de los estadistas asistentes al G20, al escuchar al convincente Bill, haya salido corriendo para reasignar alguna partida del presupuesto de defensa del 2012 hacia la asistencia a países africanos. De algún modo el destino es el mismo, porque probablemente los países que necesitan ayuda para salir de la pobreza fuesen los mismos a los que iban destinados los misiles y bombas del presupuesto de defensa (el cambio no debería ser entonces muy difícil).
Como llegó la filantropía a obtener un lugar de prestigio tal que un filantro-gigallonario como Bill Gates comparta el pulpito con los estadistas mas renombrados del planeta? Como es que llegamos a prestarle atención cuando opina sobre el rumbo a seguir para cambiar el mundo, en especial para cambiar aquellas facetas del mundo que han hecho de él la persona inmensamente adinerada que es?
El gran Bill, como tantos otros hoy mas famosos que la madre Teresa, ha construido su fortuna a base de puro merito personal. Una extraordinaria capacidad para crear plusvalía que implica talento para vender sus productos mas caro de lo que les cuesta, desactivar oportunidades para potenciales competidores, desestimular la aparición de opciones a sus productos, cerrar mercados, crear ventajas competitivas para sí que le permitan competir con ventaja por la elección del consumidor, enhebrar una larga sucesión de transacciones ventajosas para sí y muchos etcéteras mas que suenan mal pero son talentos muy bien remunerados en los países capitalistas modernos, y es correcto que así sea.
Pero sostener que un hombre con estos talentos tendrá, como consecuencia inevitable, capacidad y visión para hacer exactamente lo contrario, construir equidad, igualar las oportunidades, fomentar el acceso a millones a los productos hoy exclusivos, etc. es parte de las tantas afirmaciones mágicas de la Filosofía del Empresariado. Filosofía que ha instalado, a fuerza de darla por natural, la consigna:
Pero esta Filosofía del Empresariado ha instalado otra ley aun mas sorprendente, la que sostiene que las acciones filantrópicas son fatalmente buenas para la comunidad. La Filantropía, a través de su División Armada de Fundaciones (DAF en las siglas utilizadas por las FFAA) se ha instalado como la alternativa Beata a nuestro viejo estado nación, naturalmente maligno.
Durante décadas en la MAK nos preguntábamos porqué era bueno para la sociedad que señores como Bill Gates o Warren Buffet, con innegable talento para hacerse ricos, dispongan de obscenas sumas de dinero para gastar a discreción. Porqué Buffet o Gates harían uso de ese dinero en mejor forma para el bienestar de su comunidad que el propio estado? El tema, aunque interesante, tenía una trascendencia temporalmente limitada porque en algunas pocas décadas o, en caso de Warren, alguna centuria, el pobre Buffet ya no regiría sobre esa vía Láctea de monedas y con la ayuda de sus hijos y los hijos de sus hijos, ésta implosionaría en miles de pequeñas galaxias o minusculos sistemas solares. Y en menos de un Kalpa, o dos, no quedarian rastros de eso que alguna vez fue llamado Fortuna.
No hay como los hijos para transformar los panes en migas y ni hablar si los asiste un diligente fisco con alguna debilidad por la redistribución.
Hoy ese limite ya no existe. Las Fundaciones Filantrópicas han venido a subsanarlo.
Día a día, nuevos Mega Ricos del planeta se jactan públicamente de desheredar a sus hijos biológicos, no para tributar altos impuestos a la herencia, sino para entregar su patrimonio, esos verdaderos hijos, a Giga-Fundaciones que lo mantendrán lejos de las amenazas fiscales y de la erosión genética.
Estas Filio-Fundaciones, además, les garantizaran que sus fortunas seguirán siendo administradas bajo su misma filosofía, sin los cambios de rumbo que le suelen imponer los hijos a los legados de sus padres.
Logran así controlar su fortuna mas allá del mas allá.
Y así como la nobleza de antaño acrecentaba su patrimonio con casamientos por interés, hoy esta nueva nobleza financiera une su patrimonio compartiendo ya no la cama sino la cripta. Se crean Fundaciones grupales, donde irán a parar varias Giga Fortunas, que acrecentaran la concentración global, multiplicaran su poder de fuego y aunaran su criterio de acción.
Así un grupo selecto de padres preocupados por sus filio-fortunas evitan los factores de erosión natural a la concentración, que son el fisco y la genética, y dejan todo en manos de tutores profesionales que la administraran según la lógica de sus creadores.
El eterno sueño de la inmortalidad: el cuerpo desaparece pero el alma perdura. En este caso, la fortuna.
Hasta aquí, nada mas que una buena idea, con excelente marketing, para resolver una vieja necesidad de ricos y famosos. Nada que no hayamos visto antes, como cuando el cartel de Cali produjo su serie de extra pureza y la bautizó “Pura” o cuando Patek-Phillippe creo su modelo de reloj en diamante que no da la hora.
Pero siendo este un blog que aprecia el humor y daría la vida por una buena frase (la vida de otro, claro) no podemos dejar de destacar la fina gracia de todo esto. El gran Warren Buffet, un genio de las frases ingeniosas, debe haber estado detrás de la elección del nombre de la Fundación de Fundaciones que unirá los restos oseos y aureos de Buffet y Gates: “The Giving Pledge” o "La Promesa de Dar". Quienes recibieron en vida mas de lo que dieron, nos prometen que juntaran sus dineros, que les negaron a sus herederos naturales y a sus fiscos, para comenzar a dar apenas mueran.
Aplausos desde la MAK a la broma del 2011, The Giving Pledge y al gran Warren, sin duda alguien que mereceria ser uno de nosotros.